Venezuela ha sido para muchos como esos amores por los que sufres, ríes, lloras... Venezuela ha sido de esos amores por los que te desvelas y te preocupas aún en la distancia, de esos por los que te han dicho una y otra vez que continúes tu vida lejos y la olvides por un tiempo. Ha sido de esos amores por los que te han burlado tras considerarte "iluso" por mantener la FE de que pronto cambiará; es más, cuando has estado en medio de la tempestad para defenderla, seguro más de uno te ha gritado que dejes de perder el tiempo y que te resignes.
Venezuela ha sido de esos amores por los que oras a Dios todas las noches sin cesar... o en tus ratos libres de recuerdos y preocupaciones ante la situación en la que la han sumergido unos bandidos indolentes. Ha sido y seguirá siendo más que una Bandera o una Nacionalidad. Venezuela es la tierra por la que derramamos lágrimas cuando la vemos en medio de agonía y sufrimiento, como este 23 de febrero... y la que nos produce las emociones más indescriptibles cuando sentimos que está a punto de resplandecer... Venezuela es sencillamente una Patria que nos debemos negar una y otra vez a perder, porque lo que se ama, lo que duele en el alma como nos duele Venezuela, nunca se abandona en medio de la desesperanza...
Venezuela, mientras hemos informado de lo malo, sobre lo más cruel y perverso que te han hecho, también te hemos prometido con lágrimas en los ojos, y sin caer en cursilerías, que pronto estaremos reportando las mejores noticias en cuanto a ti, con un pueblo que te levantará con entrega y preparación... un pueblo que hoy sufre, pero mañana será feliz y permitirá que seas como el Ave Fénix y resurjas de las cenizas, más hermosa que nunca.
La desesperanza no tiene cabida en esta lucha, menos ahora que la luz de la LIBERTAD está a punto de brillar para nuestro país, por eso es necesario recordar que Venezuela es de esos amores por el que vale la pena luchar una y otra vez y sin resignación alguna...
